Es muy recomendable calcular el tiempo que se tardará en completar una carrera cuando el corredor se está preparando para una cita importante. Es algo habitual entre los aficionados hoy día, porque ayuda a hacer una planificación eficaz en la que se dosifiquen y gestionen los esfuerzos, en relación al estado de forma en el que nos encontremos y a las posibilidades que consideremos que tenemos realmente.

Si una persona aficionada al atletismo acude a una cita importante con deseos de completarla (que es lo habitual) pero no la ha planificado en base a buenos cálculos, sentirá que ha fracasado y caerá en la frustración. Es también lo que suele pasar cuando uno se marca objetivos demasiado ambiciosos, poco realistas.

Así pues, calcular bien el tiempo en torno a esta previsión, ayuda también a cumplir el objetivo y mantener la motivación. La sucesión de hitos sería así: buen cálculo y planificación, dosificación de esfuerzos, consecución de objetivos y mantenimiento de la motivación.

¿Quieres hacerlo bien? A continuación hablamos de fórmulas para calcular el tiempo de carrera y el tiempo por kilómetros: 

Calcular tu tiempo en carrera

Calcular el tiempo, a priori, puede ser muy sencillo. Hay fórmulas habituales para hacerlo, pero hay que considerar parámetros que quedan fuera de toda opción estándar, desde el progreso que sea capaz de experimentar el corredor a las condiciones meteorológicas que tenga en el mismo día de carrera o en una sesión de entrenamiento. Bien saben los amantes de este deporte que todo influye.

Fórmula 1

Habitualmente, se toman como referencia distancias inferiores, y lo mejor es verlo con un ejemplo. Imaginemos que una corredora se está preparando para una carrera de 10 kilómetros. Es conveniente realizar un test inicial de 5 kilómetros, multiplicar el resultado por 2 y sumarle 1 minuto. Tardaría, supongamos, 24 minutos en completar tal recorrido, por lo que fórmula sería: 24*2+1=49 minutos.

Se multiplica por 2 porque hablaríamos del doble de kilómetros, y se suma 1 porque hay que tener en cuenta el cansancio que se va acumulando. La cifra solo es una propuesta, es evidente que nadie se conoce mejor que uno mismo, así que puede que sea más realista sumar 2, 3, 4 o incluso más minutos.

De hecho, si hablamos de pruebas más exigentes, como una media maratón, es conveniente sumar un mínimo de 6 minutos, que pueden ir hasta los 10.

Fórmula 2

Hay otra opción que contempla valores fijos a multiplicar por el tiempo que se tarde en completar una carrera de prueba, y que variarán en función del rango de kilómetros del que hablemos.

Es decir, si la carrera es de 10 km o menos, habría que multiplicar por 2,07 el tiempo obtenido en un test en el que se recorren la mitad de km, 5. Si la carrera va a pasar de los 10 km, el valor fijo por el que multiplicar el tiempo de la prueba es de 2,2.

Siguiendo con el ejemplo anterior, multiplicamos 2,07 por 24, el tiempo en minutos que una corredora tarda en hacer una carrera de 5 kilómetros. El resultado, 49 minutos, es el tiempo que tardaría en hacer una carrera de 10 km.

¿Qué tomar como referencia?

Para saber cuánto se va a tardar en completar una prueba, lo ideal es tomar como referencia un entrenamiento realizado cerca de la misma, como una semana antes. En un espacio corto de tiempo, no influirán en la diferencia de resultados factores determinantes como el estado de forma del corredor. Otra cosa, claro, es que deba enfrentar otros obstáculos difíciles de prever.

Si el corredor es algo irregular o prefiere no fiarse solo de un día de entrenamiento, sujeto a una serie de condiciones muy concretas, puede considerar una media de varias sesiones. Hay aplicaciones móviles muy completas capaces de mostrar estadísticas veraces.

Herramientas web

En Internet hay, además de mucha información, herramientas que puedan ser útiles para diferentes perfiles de corredor, según los gustos y preferencias de cada aficionado. Una de ellas es la que ofrece CalculWorld.

Esta calculadora tiene tres valores básicos para llevar el control de cualquier carrera, como son la distancia, la velocidad y la duración. Lo que permite es conocer los tres valores a partir de dos, por lo que su funcionamiento es muy sencillo: simplemente, se trata de introducir dos de los campos.

En “Tiempo” se debe introducir el tiempo total, expresado en horas, minutos y segundos. En “Distancia”, introduce la distancia total recorrida, medida en metros o yardas. Tal campo contempla también una opción para indicar si es media maratón, 5 kilómetros o millas, 8 km, 10 millas, etc., de forma más directa.

El “Ritmo”, por su parte, mide el tiempo en horas, minutos y segundos que se ha tardado en completar un kilómetro, valor que puede cambiarse a millas, yardas o metros.

En todo caso, conviene no obsesionarse con el tiempo. Como se suele decir, Roma no se hizo en dos días, cualquier aficionado necesita de un entrenamiento a conciencia y prolongado en el tiempo para poder mejorar sus propios resultados. Más que en los resultados, habría que afanarse en encontrar y mantener los hábitos que ayuden a conseguirlos.